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Cómo identificar y enfrentar el sobreendeudamiento

Estar endeudado sin tener posibilidades de pagar y sólo viendo cómo los pasivos crecen cada día más, es una de las experiencias más angustiantes que se pueden tener en la vida financiera. Saber que tenemos un compromiso con el que no estamos cumpliendo y que cada día se vuelve más insalvable tiende a generar una sensación de incomodidad creciente.

Podrías ignorar el problema, sin embargo hacer el problema de lado sólo tiende a empeorar las cosas, tu historial crediticio tendrá una marca negativa que afecta tu futuro financiero, personal y familiar. Nunca se sabe cuándo vas a necesitar solicitar un préstamo en el futuro.

Los motivos pueden ser variados: una mala racha en los negocios, una situación de desempleo inesperado, falta de capacidad de pago al afrontar tus deudas, un estilo de vida dispendiosa o tal vez no consideraste todos los problemas que un crédito podría traerte al solicitarlo y que ahora te ahoga. Cualquiera que sea la razón, el momento de hacer frente a la situación es ahora. Confronta el problema y diseña una estrategia que te permita no llegar a situaciones extremas donde la deuda no pueda pagarse y busca que la institución financiera te facilite hacer los pagos necesarios, al final ambos ganan.

Lo primero que debes hacer es saber cómo usas el dinero para que tus gastos no terminen asfixiándote. Planificar tu situación económica te permitirá tener unas finanzas sanas en el presente y futuro.

Sigue los siguientes puntos:

Primero, saber cómo usas tu dinero

  • Elabora un presupuesto. Te ayudará a planear tus finanzas. Identifica cuánto dinero ganas y cuánto necesitas para cubrir todos los gastos del mes, sin que estos excedan tus ingresos. Es importante que reserves una cantidad fija que destinaras al ahorro.
  • Reduce gastos innecesarios. Si tienes un presupuesto ajustado, evita compras innecesarias, pregúntate: ¿es un deseo o necesidad?
  • La tarjeta de crédito. Deja de usar las tarjetas de crédito para pagos que puedes realizar en efectivo, y de ser posible cancélalas. A la larga significan gastos innecesarios que sólo suben los intereses y comisiones por su uso.
  • Destina una cantidad fija para cubrir las deudas y acelerar su pago. Paga las más pequeñas, al liquidarlas es conveniente pagar más del monto mínimo requerido por cada préstamo para que no se acumulen más intereses. De esta forma, se estará reduciendo el valor de la deuda.

Segundo, comienza a ahorrar

  • Ahorra. Se recomienda destinar el 10% de tu ingreso mensual al ahorro, esto te ayudará a tener dinero disponible para una emergencia o meta fijada. Deposita tu ahorro en una institución financiera, hay suficientes opciones que te ofrecen garantía de protección y rendimientos, así reducirás el riesgo de que la inflación disminuya el valor de tu dinero.
  • Haz tu fondo de emergencias. Un fondo sirve para atender situaciones imprevistas y debe poder cubrir al menos tres meses de tus gastos fijos.

Tercero, elimina tus deudas

  • Crea un historial crediticio positivo. Es recomendable que empieces a crear un historial crediticio positivo.
  • Paga a tiempo. Contabiliza todo lo que debes. Toma los estados de cuenta de todos los créditos que manejes, súmalos y anota la cantidad, así como quién es el prestamista, el monto que adeudas, el término del préstamo, los cargos, cuotas y tasas de interés.
  • Considera un plazo de tres años. Necesitaras fijar metas realistas para terminar con tus adeudos y que no podrás hacerlo en pocos meses. Destina una cantidad específica que aportarás cada mes y haz un compromiso contigo mismo para quedar libre de adeudos en este plazo de tiempo, o en el que sea necesario.
  • Consolida tus deudas en una sola. Actualmente existen opciones en distintas instituciones financieras que te permiten concentrar tus deudas en una sola con un interés más bajo. Revisa las diferentes opciones con las que cuentas y elije una que se adapte a tu capacidad de pago.
  • Amortiza tu capital. Si las condiciones de tu crédito lo permiten, busca hacer pagos que reduzcan el capital principal que adeudas. En algunos casos puedes amortizar la deuda para determinar una cuota fija y más baja de la que pagas actualmente, esto te conviene para que lo que pagas por intereses se mantengan estables o bajen.
  • Recorta tus gastos. Haz un cambio de raíz en tu comportamiento financiero. No agregues más cargas a tu deuda comprando cosas que no necesitas. Si la compra que quieres realizar se sale de tu presupuesto o se suma a la deuda que ya tienes, lo recomendable es que no la realices.
  • Aumenta tus ingresos. Piensa en formas creativas de aumentar tus ingresos. Puedes conseguir un trabajo de medio tiempo los fines de semana o iniciar un negocio con alguno de tus amigos. Así podrás ganar más dinero que te ayudará a lograr tu meta.

Asumir el control de tus finanzas te hará sentir mejor, poco a poco obtendrás más seguridad y con ello libertad, al final tendrás menos preocupaciones entorno a tus deudas.

Si estos pasos no son suficientes para disminuir gradual y significativamente la deuda, quiere decir que el problema es más complicado. En estos casos, lo más recomendable es acercarse a las instituciones financieras con las que se tiene la deuda para explicar nuestra situación y hablar de las posibles alternativas. Lo más importante es no ignorar el nivel de riesgo que se corre, ya que mientras más tiempo pase, más intrincada será la deuda.

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